Entradas populares

lunes, 24 de septiembre de 2007

Tu ausencia

Sin ti la noche es noche sin estrellas,
Y una lágrima caerá
Al recordar el calor de tus besos.
Sin ti el todo se transforma en nada.
El fuego arde en la callada noche
Y nadie más pondrá en mi boca su amor.
Sin ti yo soy una oposición, una calamidad, una distorsión.
Es inaceptable esta dependencia
Pero nadie más conocerá mis sueños.
Sin ti soy como una flor sin olor,
Deformada por el dolor de la soledad.
¿Como dejar esta dependencia si por ella mi alma canta?
Intensa noche solitaria,
puedo hablar apenas con tu recuerdo.
Sentir como eras en aquella noche de invierno.
La mirada que no quería que se fuera.
Los besos antes del “hasta luego”.
El sentir te tu piel, los abrazos infinitos que se terminaron.
No queda nada,
mi piel ya no huele a ti.
No queda nada,
mis labios no te pueden besar.
No queda nada más que la melancolía,
que causaste al irte tan deprisa.
Me hace falta tu calor,
las estrellas no son las mismas.
Las palabras no tienen tanto impacto...
Vuelve y no dejes de amarme.
Vuelve y no te atrevas a olvidarme.
Intensa noche en armonía,
instantes de alegría,
estás, y ya no te irás.

lunes, 10 de septiembre de 2007

Niña enamorada.


La niña enamorada, con ojos de pureza y desespero.
Bañada en vacías esperanzas, en sueños egocéntricos.
Por un momento lo admiró, ¡Por años lo amó!
Intentó omitirlo, se escondió en su mirada silenciosa.
En algunas noches lloraba, estaba creciendo enamorada.
Lloró en su delante, ¡Dulce drama!
Recitó sus versos y el se aprovechó.
Tuvo miedo y el la despreció.
Cambiaron las estaciones y ella se conformó.
Cuando la herida con esfuerzo se cerraba…
El interrumpía, ¡Todo parecía tan bello!
Caía nuevamente en el pozo de este amor platónico.
¡Apenas quería mantenerla a sus pies!
En un círculo vicioso ella lloraba y sonreía.
¡Amargo sentimentalismo!
Años después su mirada se transformó.
La niña dejaría de ser una esclava desconocida.
Se declaró, lloró y se marchó.
Por mucho tiempo pensó en el y en aquellas estaciones de dolor.
En poco tiempo la mujer despertó.
Y en algunas noches suspiraba,
¡Al recordar la niña enamorada!

viernes, 7 de septiembre de 2007

Conocer un nadie

Quisiera conocer un nadie, que brilla igual que en su niñez.
Ser un unicornio, un mito innecesario.
Quisiera crear un vagabundo, que me saque de mi insensatez.
Secar las lágrimas que mi alma solloza a diario.
Quisiera ver mi reflejo, no un vacío irreparable.
Encontrar la respuesta, para esta cuestionada existencia.
Probar el néctar de este eterno nudo que tanto aflige.
Quisiera olvidar la amarga despedida, recordar el dulce aroma de la belleza.
Descifrar el silencio, el grito inquieto.
Abrazar el dolor que todo asustó.
Talvez quisiera todo esto, talvez no quisiera nada.
Quisiera cuestionar el porque de mi respiro.
Porque el mundo gira y gira y no se detiene.
Entender aquellos que apuñalan sin avisar.
Quisiera salir de la mediocridad.
Cerrar los ojos y ver todo lo que nadie ha podido notar.
Observar el cielo y no temer la caída.
Ver mi sombra y no temer la vida.
Quisiera desahogarme, poder llorar un río de ilusiones.
Encerrarme en la noche taciturna y finalmente hallar lo deseado.
Quisiera, realmente quisiera querer algo.