Dédalo Arte & Artesanía, Paseo Saenz Peña 295, Barranco |
Habrá poesía, música, vino, en fin... arte.
Un prólogo personal que no saldrá en el libro:
Considero relevante comentar que el proceso de elaboración de este poemario empezó a mis quince años, mientras lo creaba, creaba también un refugio, donde las emociones al límite eran bienvenidas y no parte importante de una serie de pruebas para asegurar la demencia. Versos de hadas se ha convertido en un diario artístico cuyo principal objetivo ha sido deleitar a aquellos lectores con la expresión más sincera de mi misma, pues la entrega es total, y la censura entre mis lágrimas y el teclado, inexistente. En él revelaba aquél rincón oscuro que siempre escondemos, aquél rincón usualmente hiriente, ocasionalmente mágico. Es esta ocasional pero intensa magia la que estimula la idea de cuentos de hadas, pero, obviamente, siendo versos. Son estos poemas donde la exaltación de los sentidos y de las emociones, tanto de rabia como del más sincero amor, lo que iluminaba mis más oscuros días expresando esa autenticidad tan difícil de exteriorizar. Entraré entonces al tema de identidad, según la mayoría, soy excéntrica, según mis amigos, estoy loca; según los desconocidos, soy un punto de interrogación. Quizás el único lugar donde me identificaré será dentro de ciertos versos, dentro de cierta musicalidad, de cierta magia que alimenta tan desesperadamente mi alma, quizás, irremediablemente desorientada.
Desearía que los versos de hada sean aquellos que tengan ciertos efectos en los lectores, como soñar despierto, llorar al relacionarlo con la propia existencia, apreciar una singular musicalidad, enfrentar un sinnúmero de extremas emociones, etc. Además, mi prioridad aquí es contemplar el proceso de construcción de la identidad de una niña que está tratando de no crecer; no como se supone que debería, al menos.
Es el conjunto de versos y la construcción entera de ellos el mensaje que quiero proporcionar. Esperanza ante las adversidades, dolor inherente al amor, desesperación ante pérdidas, crisis existenciales, cuestionamientos de la propia cordura… estas y otras son el reflejo de un intento por conocerse a uno mismo con respecto a la sociedad a la cual pertenece y con la cual convive.
La última sección “de vuelta al olvido”, trata de ser un estímulo, pues son los últimos poemas que han sido escritos, es decir, este proceso funciona, para conocerse y salir del hoyo de la desesperación constante. Sin embargo, al volver al olvido quiero decir que la realización personal y la superación de las dificultades personales, no está necesariamente (al menos no para todos, menos para las hadas), en encajar de forma productiva y esperada en la sociedad. Por ejemplo, “¿No puedo rimar porque hoy en día ya no se rima?” Pues lo siento mucho, mis inspiraciones más ardientes no son “de hoy en día”. Todos pueden encontrar su lugar, lo que no podemos hacer es creer que si alguien no “encaja” es porque es disfuncional, enfermo mental o un inútil soñador.
Soñar jamás será inútil; Sobre todo en tiempos de crisis. Escribir jamás será inútil; Sobre todo cuando en las líneas encuentres a las más bellas y fatales de las emociones, entre ellas, la verdad.