Enciende aquella vela que en ti habita,
escucha el fuego que lentamente quema tu cuerpo.
Siente la dulce fantasía de apretar tus labios con los míos.
Fatal son tus hipnotizantes palabras,
el recuerdo de tu perfume.
Y esa sonrisa… tan fatal como precisa.
Perecen aquellos labios temerosos,
de aquél que, como tú, no arriesga, no vive.
Debajo de las sábanas existe un enigmático mundo,
fascinante, peligroso, apasionante.
¿Qué esperas para perderte en él?
Dulce flor que baila con el viento,
cuyas enaltecedoras espinas,
anuncian una ardua travesía.
No estimules el sinsentido,
no exageres con el orgullo,
deja que los pétalos se estremezcan con el rozar del viento.
escucha el fuego que lentamente quema tu cuerpo.
Siente la dulce fantasía de apretar tus labios con los míos.
Fatal son tus hipnotizantes palabras,
el recuerdo de tu perfume.
Y esa sonrisa… tan fatal como precisa.
Perecen aquellos labios temerosos,
de aquél que, como tú, no arriesga, no vive.
Debajo de las sábanas existe un enigmático mundo,
fascinante, peligroso, apasionante.
¿Qué esperas para perderte en él?
Dulce flor que baila con el viento,
cuyas enaltecedoras espinas,
anuncian una ardua travesía.
No estimules el sinsentido,
no exageres con el orgullo,
deja que los pétalos se estremezcan con el rozar del viento.
2 comentarios:
No hay nada como sentarse a leer tus poesías en voz alta. Me transmiten una emoción, una pasión, una melancolía, un dolor, una fantasía... Es increíble como consigues el ritmo en las palabras, te felicito, realmente.
Déjame decirte que eres la chica más guapa que he conocido jamás, más interesante y con los pensamientos más poéticos, fascinante
Publicar un comentario