I
Te cuento,
Con una pizca de dolor
Y una cucharada de ilusión,
Que te amo a todo momento.
Ese es el inicio y el final de este cuento.
¿Cómo olvidar la leyenda de los amantes?
Las risas en la madrugada,
El cóctel de amor que te regalaba.
Las discusiones
Filosófico políticas más apasionadas.
Las más felices de las mañanas.
En las que se acompañaba el pan con una caricia.
No me queda más que el cuestionar…
¿es virtuoso el batallar?
¿Qué derechos avasalla mi alma?
Pásame otra botella,
Y un puto cenicero.
Pues de cenizas en la cama,
Ya me sobran los recuerdos.
Inhalo el humo,
Casi tan delicioso como tus labios.
Solo me queda encender un cigarrillo más,
Solo uno…
A la mierda la inseparable realidad.
Me tropecé,
Qué torpe,
cai en el pozo del amor no correspondido,
De ira y agresiones
A amor
Y rendiciones.
Sobre incansables noches,
Susurra el viento sus versos.
De quien se enamoró,
De quien perdió.
De quien jamás se rindió.
Cuentan que es una absurda obsesión,
parece una dama enloquecida, dicen ellos.
Por lo pronto, te regalo los versos que cada día te escribo,
en honor al corazón.
Y te relato el porqué,
Pero en rima cruzada,
De mi eterna espera.
Sí, tal cual cuento de hada.
II
Te cuento,
Con una pizca de dolor
Y una cucharada de ilusión,
Que te amo a todo momento.
Ese es el inicio y el final de este cuento.
¿Cómo olvidar la leyenda de los amantes?
Las risas en la madrugada,
El cóctel de amor que te regalaba.
Las discusiones
Filosófico políticas más apasionadas.
Las más felices de las mañanas.
En las que se acompañaba el pan con una caricia.
No me queda más que el cuestionar…
¿es virtuoso el batallar?
¿Qué derechos avasalla mi alma?
Pásame otra botella,
Y un puto cenicero.
Pues de cenizas en la cama,
Ya me sobran los recuerdos.
Inhalo el humo,
Casi tan delicioso como tus labios.
Solo me queda encender un cigarrillo más,
Solo uno…
A la mierda la inseparable realidad.
Me tropecé,
Qué torpe,
cai en el pozo del amor no correspondido,
De ira y agresiones
A amor
Y rendiciones.
Sobre incansables noches,
Susurra el viento sus versos.
De quien se enamoró,
De quien perdió.
De quien jamás se rindió.
Cuentan que es una absurda obsesión,
parece una dama enloquecida, dicen ellos.
Por lo pronto, te regalo los versos que cada día te escribo,
en honor al corazón.
Y te relato el porqué,
Pero en rima cruzada,
De mi eterna espera.
Sí, tal cual cuento de hada.
II
Aún recuerdo momentos del final desautorizado,
en el que se detuvo mi corazón.
De todas las promesas que, con lágrimas, habíamos realizado,
La que susurrabas que nunca me dejarías no pensé fuese invención.
Repetidos días bajo las sábanas esperé tu arrepentimiento.
Eras todo para mí, el mundo dejó de poseer sentido.
No conseguía recibir caricias ni del viento,
Seguía sólo en busca de tu latido.
De un día para el otro tu cariño olvidaste,
Yo temía un estúpido final irremediable
Y con desdén me trataste.
Te odié, ¿pero al amor quién lo entiende? Es inexplicable.
Tan solo en este espacio quería comentar
Que aún no sé cómo vivir sin tu sonrisa,
Que aún me cuesta cada mañana al despertar.
Y que no exijo prisa.
Eres tú, lo sé ahora más que antes.
Sé que mi triste alma no está en todo su esplendor,
Pero a pesar de los errores andantes,
Fuimos felices al sumergirnos en aguas de amor.
Esperaré lo que tenga que esperar,
Para que dejes de humillarme
Viajaré dónde tenga que viajar,
Hasta que recuerdes lo bello que es amarme.
Es que no entiendes cariño mío,
Seguiría dando mi vida por ti
Nunca le prometí al vacío.
Y Sí te lo prometí a ti.
en el que se detuvo mi corazón.
De todas las promesas que, con lágrimas, habíamos realizado,
La que susurrabas que nunca me dejarías no pensé fuese invención.
Repetidos días bajo las sábanas esperé tu arrepentimiento.
Eras todo para mí, el mundo dejó de poseer sentido.
No conseguía recibir caricias ni del viento,
Seguía sólo en busca de tu latido.
De un día para el otro tu cariño olvidaste,
Yo temía un estúpido final irremediable
Y con desdén me trataste.
Te odié, ¿pero al amor quién lo entiende? Es inexplicable.
Tan solo en este espacio quería comentar
Que aún no sé cómo vivir sin tu sonrisa,
Que aún me cuesta cada mañana al despertar.
Y que no exijo prisa.
Eres tú, lo sé ahora más que antes.
Sé que mi triste alma no está en todo su esplendor,
Pero a pesar de los errores andantes,
Fuimos felices al sumergirnos en aguas de amor.
Esperaré lo que tenga que esperar,
Para que dejes de humillarme
Viajaré dónde tenga que viajar,
Hasta que recuerdes lo bello que es amarme.
Es que no entiendes cariño mío,
Seguiría dando mi vida por ti
Nunca le prometí al vacío.
Y Sí te lo prometí a ti.
1 comentario:
Es muy bello
Publicar un comentario