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viernes, 10 de julio de 2009

Se ha ido


El día está hermoso, la noche también lo estará.
Los pájaros cantan a lo lejos, tan lejos que ya no los logro escuchar.
Las rosas mantienen su aroma, aunque ya no lo pueda encontrar.
Podría escribir tantos bellos versos.
Podría también, llorar su partida.
No hay nada más triste que ver el llanto deteniendo la poesía.
Se ha ido, se ha ido y las rosas aún retienen su dulce fragancia.
Se ha ido y aún existen ambiciones.
Se ha ido, y en mi alma tan solo reside el dolor.
Rojos ojos de tanto llorar junto con la voz trémula de tanto gritar.
El día de pronto pierde su belleza y la luna pierde su ansiada espera.
Viaja luna, viaja junto a su rostro.
Si ya no lo veré, luna ya no podré amarte.
Sol, ya no calientes mi desesperación.
Nos amamos, al menos eso pensé.
Ahora pienso que mis labios amaron los suyos con mayor dedicación.
Se ha ido, se ha ido con dolor. Pero se ha ido.
¿Cómo pudo irse?
Resaca de despedida.
Alcohol y desesperación.
Se ha ido.
Que la corriente se lleve mi dolor.
Para que mi alma descanse, junto con su rostro.
Su rostro, ya no sé ni como está.

2 comentarios:

Alfredo Villavicencio Vieira dijo...

Consejos como amigo: si las rosas retienen su dulce fragancia, si aún tienes ambiciones, si aún ves la luna (por más que esté viajando), si sabes que los pájaros continúan cantando, si existe la posibilidad de que exista un día hermoso, es por una simple y fuerte razón: porque la vida continúa y razones sobran para que puedas tenerte a ti y a tus amigos (que están a tu lado) frente a cualquier complicaión temporal, o eterna. Piensa bien que la autoconfianza que tienes para poder llegar a plasmar tantos sentimientos, sólo se da por la fuerza que tienes, "pequeña gran súperpotencia".

Consejos como lector: espectacular (por bueno, no por espectáculo) el escrito. Pero, ¿te has planteado alguna vez escribir acerca de tu felicidad, en vez de tus tristezas? Es cierto que la tristeza inspira y bastante, y sobre todo la nostalgia (te lo digo, puesto que lo estoy experimentando), no obstante podrías dedicarte una obra a tus momentos felices. Conclusión: ¿por qué recordar a alguien con tristeza?, ¿por qué mejor no recordar todos los momentos felices que tuviste con "ese alguien" y dejar toda nostalgia y perjuicio (no prejuicio) atrás (aunque sea algo paradójico, pero viable)?

Unknown dijo...

En realidad sí te entiendo Alfredito. Créeme que lo he intentado. Tengo algunos escritos que fueron inspirados por el amor, más que por la tristeza. Sin embargo, el escribir es como una terapia para mí, además de una expresión de liberación, de mostrar que algo bello puede surgir de sensaciones adversas. Cada escritor tiene su estilo, el mío mutará (como ya lo ha hecho) dependiendo de lo gratificante que sea para mí (y para mis lectores, claro) los poemas que realice. En otras palabras, puedo estar mega feliz y expresarlo con una sonrisa y una tarde con mis amigos; Cuando la tristeza (o el vacío, la melancolía etc.) invade mi alma, escribo mis mejores poemas, y en estos incluyo fragmentos de esperanza o alegría. (como esos que tan bien citaste, no están por las puras) jajaja
De nuevo, gracias por tus comentarios, me agrada alguien que se interese tanto por mí, como por lo que escribo. Un besote cuídate.