Entradas populares

jueves, 24 de mayo de 2012

¿Cómo ama el hada?




Con su semblante
Su belleza andante.
Su entrañable mirar.
Con la intensidad de los mares.
Dispersa,
Como siempre ella,
Alerta,
El miedo le congela.

Revive,
Pide enaltecida,
Su quebrado corazón llora.
Si te ama mil besos al día recibirás.
La verás caer.
Si la amas la abrazarás.
No habrá cosa en el mundo que por ti no hará.

Ama encarecidamente con una ingenua alma
Tal cual dama te obsequia su cuerpo cada noche.
Juntos un nido formarán,
De quimeras, risas, cantos y arte.
Al hada le serás siempre fiel,
No querrás ver tal mágico ser enfurecido.
y como las damas de antaño, ella a ti siempre fiel te será.

El hada reflexiona y su existencia se cuestiona,
Ama un humano, con todo lo humano que es.
En ambos mundos vivirán,
Nadie sabrá cómo, es un secreto colosal,

El amor de un hada no se opaca,
De ira a caricias saltará,
Pero gris nunca lo será.
Te ama, créele. Soñará contigo noche tras noche.

Le crees, no quieres de ella separarte.
Qué bello nido sembraste,
A la merced de arboles y manantiales,
De  sonrisas y animales.
¿Es vicio si la abstinencia es impensable?
Es amor,
No otro amor condenado,            
Sino Un amor de jardines y caballos alados.







miércoles, 23 de mayo de 2012

Hada encarcelada



Del loquero en la ciudad
De la lágrima vengadora
De la miseria creadora
Del amor en tempestad.

De por vida el destino te sentencia,
Voces, cortes, lágrimas, euforia, ira y traición.
Todos te traicionan.
No te lo tomes tan mal.
¿Por qué le habrías de importar?

Tengo miedo.
Desordenados gritos de desesperación,
Mil horas buscando tu adoración.
Como si siguiera con aquella máscara,
Que podría engañarnos a todos.
Ya me olvidé cómo disimular,
No tengo idea de cómo ser normal.

Ya quisiera andar por este mundo sin tambalear
O poder las leyes y ordenes acatar.
Un día me quité la máscara,
Pensé que estaba en confianza.
Loca te llamaron y solo faltaba atarte.
Y cuando solo querías dormir…
¡Despierta que ya casi es de noche!
¿No es siempre de noche?


“Caballero” Andante




Caballero andante:
Me atrevo hoy a hablarte.
Numerosos caminos has recorrido
Con tu aliento a alcohol, con tus quiméricas promesas.
No sé dónde encontrarte
Y menos si quiero hacerlo.
Habría besado esa cicatriz en tu alma,
Habría cubierto tu miedo con sueños.
Me trataron de advertir: demasiada devoción,
Hasta que fue demasiado tarde,
Cual brujo ataste sin piedad este corazón.
Llanto tras llanto, ya te sabes la historia.
Grité con todas mis fuerzas que moriría sin ti.
Aquí va la sorpresa
Sobreviví.
Sin embargo…
De por vida me lesioné.
No solo te sigo viendo en el espejo, en los arboles.
me azotaría por el pecado de aún pensarte.

Devuélveme los días de total entrega,
La cordura que aún me restaba.
El luto por tu amor trastornó por siempre mi ser.
¿Qué veneno sembraste en mi interior?
Maldito caballero andante,
Ya sin princesa y con un falso caballo con ruedas.
Perdiste tu honor,
La promesa de tu amor se pudrió.
Junto al sueño del eterno amor al estilo Disney
¿Cómo puede tal crimen salir impune?
¿y mi inocencia?
Muerta.


Amanecemos en batalla



Cariño, sentido de este enamorado suspiro,
¿Encontrarías descanso en un separado camino?
Amanecemos en batalla,
Nos disolvemos en inmortales alaridos,
producto de sentimientos destructivos.

No llores si un día creíste
No llores si un día lograste amar

La perfección no es compañera del alma.
Sin embargo, sí intenté ser yo tu compañera.

No esperaré un mejor final,
No miraré para atrás,
No queda nada en mi interior que lo pueda soportar.
¿Cómo tú, fuiste tan malévolo?
Confié en ti, en tu interior, en tu honradez.
No sujetaré mi último aliento.
Las paredes deben ser acolchonadas.
Las puntas deben ser retiradas.
Tus reflejos destruidos.
Si no, lo estaré yo.

No busques la salida del cobarde,
Tus mentiras no fueron para mejor,
Y tu abandono fue de lo peor.
Hablas de un adiós,
Llamas a la rendición.
Cuestionas este desordenado amor.
Cuando eres un caos en tu interior.

Ahora que pienso más coherentemente,
me repugnan tus acciones, o eso creía,
también tu fingida sonrisa.
Tus celos inagotablemente inexplicables.
Ahora soy libre pues veo tu rostro,
Tu frialdad, tu injusto obrar.
¿Para qué mierda querría yo tanto dolor?
Aún así, esta es una historia
Que se olvidó de cómo terminar.



Te faltó el valor



 
Disipé lo restante de tu fragancia
Me rendi y me levanté tantas veces cuantas mudaba de humor.
De ira y agresiones a amor y rendiciones.

No me queda más que el cuestionar…
¿es virtuoso el batallar?
¿Qué derechos avasalla mi alma?
¿Podré olvidar quien recuerdo con solo mirarme al espejo?
Olvidar tu mirar, nuestras risas en la madrugada.
¿El rose de tu mano?

Pásame otra botella,
Y un puto cenicero.
Pues de cenizas en la cama,
Ya me sobran los recuerdos.

Inhalo el humo,
Casi tan delicioso como tus labios.
Solo me queda encender un cigarrillo más,
Solo uno…
Languida y melancolica resulta la inseparable realidad.
Cruda y cruel.
Y como quema.
Este fuego que me quema por dentro.
Por los besos que no nos daremos,
Las historias que no nos contaremos,
Las contradicciones en las que caimos.
Y aún no nos levantamos.

No es capricho de niña,
Ni fantasia de ninfa,
es solo que ingenuamente te creí.
pensé que podrías probar la inmortalidad.
Que aguantarías ser el personaje de una leyenda.
Que será eterna, pero ya no contigo.