Extraño tu aroma de hierbas y tabaco,
Tu amor, tus gigantes lentes y tu sonrisa.
Ahora ya ningún cristal me protege,
De esa endemoniada enfermedad,
Del inminente “y nunca más”.
Ahora entiendo el dolor de tu mirada,
Sabiendo que pronto ya no estarías.
Y mil perdones por ser niña,
por no comprender cuánto te extrañaría.
Por ausentarme,
Por negarme a ver lo que dolía.
Daré todo de mi,
para que estés orgulloso siempre,
desde donde sea, por donde vayas.
Si pudiera acercarme a aquél sillón,
Inundarte de abrazos y filosóficas reflexiones…
Jugar con tu gorrita de paja y decirte apropiadamente adiós,
No tengo idea de qué te diría.
Solo sé que no me permitiría llorar,
Pues al sonreír, así me debes recordar.
"Ahora que estoy algo de vuelta a la sociedad... Que ando, medio loca, por ahí. Que canto, que vivo, que respiro… Me preguntan cómo lo hice. Es simple y tenía solo dos opciones… Llegué al fondo: Era lucharla o dejarme morir"
Entradas populares
-
Aún recuerdo momentos del final desautorizado En el que se me paró el corazón De todas las promesas que, con lágrimas, habíamos realizado, L...
-
JUEVES 2 DE JUNIO: Dédalo Arte & Artesanía, Paseo Saenz Peña 295, Barranco 8PM Habrá poesía, música, vino, en fin... arte. Un prólogo ...
-
Y se fue, con todo lo que podía llevarse. Rompiendo las futuras promesas. Ahogando en llanto a quien más estimaba. Se fue, con su tierna mir...
-
De ti probé un nuevo sabor, Intrínseco de tu esencia. Sabor tristemente compañero del orgullo. Del miedo y de la mediocridad. Ven conmigo, a...
-
Extraño tu aroma de hierbas y tabaco, Tu amor, tus gigantes lentes y tu sonrisa. Ahora ya ningún cristal me protege, De esa endemoniada enfe...
viernes, 4 de marzo de 2011
Taita
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
hermoso.
Publicar un comentario